lundi, décembre 04, 2006

El deber para consigo mismo

Hiphoperos, goticos, punks, neonazis, emos, visual, otakus, gotiklolitas, ciberpunk, hippis, trashers, metaleros, artesas, artistoides y toda la larga lista de etceteras que completa la larga lista de subculturas urbanas (que nos tomaría un blog entero) se me vinieron a la cabeza cuando leía esta cita, por supuesto, de Lord Henry, cuando se refiere a los los pecados prestados.
Y es que todos estos tienen identidad, o es la identidad de la masa la que los completa, por decirlo de algun modo. La que completa esa ausencia de caracter personal, que los identifica como individuos.

Por que un jovecito - a veces no tanto - vestido con el uniforma que le corresponde a cada uno de los nombres, no es él. Vemos en el a otro, o a otros. A una manifestacion cultural que ha decidido con más o menos trasfondo y tino - buen gusto - disfrazarse de tal o cual cosa. Y digo disfrazarse por que son pocos en realidad aquellos que realmente son lo que aparentan ser.
De entre ellos los visual hasta me parecen los más siceros. Sólo forma, sin fondo, y asumida tal ausencia de sentido desde su origen, siendo ese su sentido.

Pero del resto, nada. Todos han caido en una máscara de imagenes comunes que los hace desaparecer como tales, y aparecer sólo la comunidad, el conjunto, el montón, la masa. La masa de la que curiosamente, intentan distanciarse.

El asunto está en quecaer en eso, es tomar prestado un caracter, un modo, una individualidad de los primeros que alguna vez se vistieron y fueron así, por algo, un algo que ahora fue olvidado o al menos no internalizado. La influencia ha sido potente, pero, son personas o son una masa?

Por que influir sobre una persona es transmitirle nuestra propia alma. No piensa ya con sus pensamiento naturales ni se consume con sus pasiones naturales. Sus virtudes no son reales para ellas. Sus pecados, si es que hay algo semejante a pecados, son prestados. Se convierte en eso de una música ajena, un acto de una obra que no fue escrita para ella. El fin de la vida es el propio desenvolvimiento, realizar la propia naturaleza perfectamente, eso es lo que debemos hacer. Lo malo es que la gente estan asustadas de si mismas hoy día. Han olvidado el más elevado de todos los deberes: El deber para consigo mismo.

Pero no va el asunto en ponerse a criticar livianamente toda esa manga de personajes que llenan las ciudades hoy en día, a favor o en contra, más a la derecha o más a la izquierda de las urbes. Lo que nos interesa en esta reflexión es más lo segundo.

El fin de la vida, dice Henry, es el propio desenvolvimiento. Tal desenvolvimiento, es claramente personal, individual más bien, para mantener la escala de la óptica.
Y aquí llegamos a la prima máxima de las citas encontradas y seleccionadas de Lord Henry. Que hay muchas más, claramente, pero esta selección me deja bastante contento. Decíamos entonces sobre este comentario final de Lord Henry que reune, a mi juicio, lo mejor de su posición...

El deber para consigo mismo, que es el primero con el que llegamos al mundo y el primero que olvidamos.

No me quiero explayar en esto, sólo dejar una interrogante...

Cual es el deber para consigo mismo? Qué es lo que me debo a mi mismo?
Existe realmente ese deber? Hay algo que nos mueve, que nos da el aliento de vida y nos pone un proposito ante nuestros pies, al que le tenemos que rendir cuentas?
Ese deber tendrá que ver con el destino quizás, con la realización personal, o la salvación del alma?

En caso de existir ese Deber para consigo mismo, es una cosa que no parece ser tan arbitraria, pues no tiene que ver necesariamente con lo que queremos o con lo que nos gusta, si no con algo más profundo en la esencia de la persona, algo que seguramente nos hace recaer o nos hace dar cuenta de su existencia continuamente.
Es conocida la historia del guerrero que queria ser santo, y cuando fue a un templo Krishna a inciarse, le dijeron que su camino espiritual consistía primero en no negar su esencia. Así este debia en esta vida ser un guerrero, y quizás en otra ser un santo.
Es una fabula vieja, y poco aplicable por el extremo en el que se encuentra, y por que propone una idea de la cual no todos tienen -tenemos - por que estar de acuerdo - la reencarnación - pero es interesante darse cuenta que quizás si haya un algo que nos defina...

El que encuentre el propio, me cuenta...
Yo aún busco

samedi, décembre 02, 2006

Sentidos y Alma

La existencia del alma es una cosa compleja de entender para las mentes occidentales sobre todo. Sin embargo, aún sin entenderlo bien, atribuimos socialmente al alma varias características. Sin embargo, muchas de las condiciones conocidas, popularmente, como parte de las propias del alma, son en general relacionadas directamente con la pureza y la inocencia de almas virtuosas llenas de bondades y sentimientos excelentes. Pero en relación a eso, que recordemos un poco, la idea de estas citas era ver justamente el tema de la inocencia, nos topamos nuevamente con Lord Henry (claramente quien debería haberle dado el nombre al libro, no Dorian, que es un niño bello, bellísimo, pero con la sola caracteristica de ser conciente de su belleza, sólo gracias a Lord Henry. Sin Lord Henry no hay Dorian, dejemos eso claro), que esta vez, Lord Henry digo, que con tamaño parentesis cualquiera se pierde. En fin volviendo a Lord Henry, y valga la redundancia, hace la siguiente reflexión.

Sólo los sentidos pueden curar el alma, así como el alma es lo único que puede curar los sentidos.

Pero vamos por parte que no es tan rápida de entender esa cita. Osea, semanticamente si, esta clara. Una relación en temas de sanación entre el alma y los sentidos. Cualquier idiota es capaz de cazar esa idea. Pero a que se refiere Henry con Sentidos, con Alma y con Curar?
Ah, la cosa resulta no ser tan evidente, simple si, pero no fácil, que a saber, son dos cosas distintas y hasta pueden llegar a ser opuestas.

Dejemos entonces que es simple pero no fácil, y estando ahora ya de acuerdo en esta presición, absolutamente sin importancia en este discurso en particular, vayamos al tema de los Sentidos.
Que son, básicamente, aquello que nos hace humanos. A pesar de que, como se ha dicho en el Libro de las Previsiones, Sabremos cada vez menos que es un Ser Humano, aún así estamos más o menos de acuerdo en sus cualidades animales, instintivas, que se rigen por los sentidos básicos de cualquier cuerpo vivo del reino animal. De esos sentidos, en conjunción, que son los que se usan para conocer el mundo de manera primigenia nace esta idea de Sentidos, que son los que impulsan al hombre animal, hombre natural, Hommo Primo quizás. Que son lo que nos hace realmente seres humanos. Formas racionales y lógicas, figuras retoricas gastadas para tratar de entender de forma errada al ser humano, pues no somos ni por asomo criaturas con estructuras tan positivistas como para ser desarmadas en un laboratorio. Mutilado nuestro ser para su estudio, no queda nada. Para conocernos, hay que hacerlo en terreno, en el dia a dia, en su aspecto primitivo, que es también el que sostiene el mas sofisticado. El Hommo Primo es ontologico, y es según le son propios los sentidos que componen esa cosa que arrastra desde el origen de si mismo, que puede desarrollar sí, decorar sí, sofisticar, también, pero que aún así, permanece en su interior esa cosa más primitiva que llamamos sentidos, pero los sentidos del Hommo Primus, no los sentidos del Hommo Sapiens Sapiens, que de esos abundan destripados en museos, laboratorios, oficinas, escuelas e iglesias.

Y estos sentidos, que ya tenemos una idea más o menos clara de donde vienen - desde mi personal interpretación - pueden curar el alma, pero a qué se refiere con alma?

Hagamos un ejercicio que la lógica moderna condenaría, pero partamos primero con la palabra Curar.

Qué puede estar herido en los sentidos? Un sentido menos significa una discapacidad, pero en el contexto dado, un sentido herido plantea una mutilación, pero una mutilación metafórica, no un ojo menos o cosas semejantes.
Y es que no poder hacer aparecer a ese Hommo Primus, plantea la cuestión de si quien sufrió esa mutilación es aún un hombre, o no.
El curar entonces sería el devolver esa condición de Hommo Primus a una criatura cuya condición primigenia de instinto, fue mutilada.

Aquello del alma nace como pregunta. Y no he querido dar respuestas taxativas aquí, por que esta cita me despierta más interrogantes que respuestas.
Puede un hombre, que no es un Hombre - Hommo Primus - tener Alma? El Alma deviene de la condición natural o de la forma fenotípica?

Para mi el hombre nace de su condición natural, es tan natural como es cualquier cosa natural. Qué sea capaz de artificializar su mundo es un cuento que no corresponde aquí, pero Hombre como tal, si tiene un alma, esta no depende de una logica estructurada, ni de una razón intelectual, si no de lo que lo hace hombre, que es el aspecto natural de los sentidos.

Como en la entrada anterior a este blog, ceder a los sentidos, es mantener el alma, y la supremasía de esta, en un mundo sin ella, es lo que mantiene vitalidad de los sentidos.
Inocente o culpable aquel que mantiene y hace alarde de su condición humana?
Inocente o culpable aquel que mutila de su ser el alma, y acondiciona sus sentidos para percepciones esquemáticamente racionales?

Liberarse a la pasión, es recordar de que estamos echos...


Fotografías de Herb Ritts